Se estanca la confianza de los consumidores

La consultora Kantar ha elaborado la tercera edición del Informe de Perspectivas de Consumidor de 2021, un informe que analiza la confianza del consumidor entorno a la economía propia y del país.

Según los datos que ha obtenido la consultora, la recuperación anímica de los consumidores fue rápida, pero a la vez desequilibrada, y ahora se encuentra en estado de estancamiento. Dicho estancamiento se debe a una economía global “al ralentí” juntamente al descenso de los ingresos de gran parte de los consumidores, sobre todo de los afectados por los ERTE.

El Índice de Comportamiento del informe, que es resultado de la valoración de la situación económica propia y del país, la valoración del momento de consumo y las perspectivas económicas a seis meses, se ha situado en el -5,5, un punto menos que en el segundo trimestre del año. El único indicador positivo dentro del índice es la valoración de la situación económica del hogar, que se sitúa en un 45%, pese a que experimenta una bajada de seis puntos.

La previsión de la economía doméstica ha descendido seis puntos respecto al trimestre anterior hasta situarse en el -7%, mientras que la situación del país, tradicionalmente el peor valorado, mejora tres puntos y se posiciona en el -49%.

Respecto al empleo, se ha obtenido el mejor dato de seguridad desde que se puso en marcha el índice en 2010, ya que un 84% de los encuestados cree que lo mantendrá en los próximos 6 meses. No obstante, pese a que todo está volviendo a la normalidad, a día de hoy muchos consumidores tienen incertidumbre respecto al nivel de ingresos con el que contarán en un futuro. Concretamente, un 25% de los consumidores no saben si tendrán asegurados sus ingresos en el futuro, mientras que un 8% cree que estos ingresos descenderán.

El índice de consumo señala también un retorno a la normalidad, pese a que ha caído el número de los que piensan que se puede mantener el consumo, un 67%, y ha incrementado levemente el número que personas que opinan que se debe reducir, hasta situarse en un 25%.

La valoración del momento para comprar productos y servicios ha bajado cuatro puntos respecto al trimestre anterior y todos los productos empeoran su valoración, excepto en el caso del ocio, hogar, pequeños electrodomésticos y ropa, que aumentan ligeramente.

La euforia de la apertura de las actividades relacionadas con el ocio que se experimentó el trimestre pasado ha dejado paso a la estabilización. Actualmente, cae casi seis puntos la intención de viajar los fines de semana y cuatro puntos hacer largas vacaciones o un crucero.